¡Hola hola!
Creo que ya estaba tardando en publicar alguna galleta navideña, así que allá vamos.
Esta era mi primera prueba con papel de azúcar y la verdad es que da un resultado estupendo. Se puede hacer el dibujo o foto que se quiera y siempre quedará perfecto.
Por lo que he visto, hay dos tipos de papeles o soportes de impresión (si no es así, que me corrijan los más entendidos en el tema): el papel de azúcar y la oblea o papel de arroz. La diferencia es que el papel de azúcar es como un papel fotográfico, es decir, queda flexible y con los colores muy vivos. El de arroz queda rígido (es una oblea) y los colores más apagados, aunque todavía no lo he usado así que no os puedo decir más.
Las que veis aquí las hice en papel de azúcar y con colores fuertes, a propósito, para ver cómo quedaban, y podéis ver el resultado.
Se pueden pegar directamente en la galleta, aunque si os ha quedado un poco irregular, esos defectillos se pasarán al papel. Para evitar esto, se puede poner una capa de fondant entre la galleta y el papel.
He de confesar que se me fue un poco la mano con el fondant y me quedó demasiado gordo y además lo puse blanco, así que una vez pegado el papel, quedaba un canto blanco bastante horroroso. Para disimularlo, hice simplemente unas florecillas con fondant rojo y las pegué a la galleta con un poco de glasa verde, unos colores muy navideños. Entre el papel y la decoración puede que quedaran un poco recargadas de color, pero bueno, estas fueron así. Las siguientes las cuidaremos más.
Otro tema a tener en cuenta si os animáis a trabajar con papel de azúcar es la humedad. Como todo papel, no aguanta mucho la humedad. Pero yo como soy así, se me ocurrió "pegar" el papel humedeciendo muy ligeramente el fondant con agua (como hago cuando quiero pegar dos trozos de fondant). Pues bien, NO LO HAGÁIS. Recién puesto el papel quedaba muy bien, pero al poco tiempo empezó a abombarse de una manera muy fea y a ponerse un poco pegajoso. Ya os aviso que si lo tocáis en esas circunstancias, se corre la tinta y queda horroroso. Imagino que además de humedecer el fondant, la culpa también la tuvo la humedad ambiental, bastante alta estos días.
Total, que para arreglar este lío, nada mejor que un leve toque de secador para quitar la humedad y meterlas en una lata para protegerlas y listo.
Moraleja: pegar el papel con pegamento comestible, mantequilla, o similar y proteger las galletas de la humedad ambiental.
Animaos a probar el papel de azúcar, que da mucho juego y, como podéis imaginar, se pueden decorar un montón de galletas en un momentito (¡recortar, pegar y listo!).
¡Besos!
P.D: Enlazo esta entrada en la fiesta 45 del blog "Personalización de blogs".
Te compraste una impresora de tinta comestible!!! Que profesional!!!
ResponderEliminarJeje, para la primera prueba me parecía un poco agresivo, pero lo mismo se la pido a los Reyes... :)
EliminarTe quedaron preciosas, y saliste al paso de esos defectillos. El papel de azúcar da muchas posibilidades y se decoran las galletas en un ratín.
ResponderEliminarBesotes
¡Gracias! A veces las galletas quedan bien a la primera, pero otras hay que arreglar cosillas....
Eliminar¡Besos!
Sofía, me encantan estas galletas!!
ResponderEliminarY los colores tan vivos y alegres... <3 <3 <3
¡Preciosas, como todo lo que haces!
¡¡Besitos!!
Jajaja, ¡muchas gracias, Susana! Me encanta leer siempre tus mensajes.
Eliminar¡Besos!
Hola guapa,
ResponderEliminarme encantan esas galletitas. La verdad es que el papel nos saca de algunos apurillos.
Besos!
¡Muchas gracias! Sí, creo que lo usaré bastantes más veces, sin ir más lejos, ya tengo una entrada pendiente de publicar con más papel.
Eliminar¡Besos!
te quedaron muy bonitas, y el búho que solo ya es muy bonito, con el gorro de Papá Noel está genial. Eres fantástica con tus ideas. Besos.
ResponderEliminar¡Muchas gracias! Ya te digo siempre que tú me miras con buenos ojos... Y el búho es espectacular, le quedó bien al artista!
Eliminar¡Besos!